Antes del debut en diabetes, hay una serie de factores que indican un mal funcionamiento de la insulina, y que pueden ser una señal para prevenir y evitar el diagnóstico.
La insulina es producida por el páncreas y se encarga de hacer llegar la glucosa a las células del organismo para que ésta se convierta en energía. Si se genera una resistencia a la insulina, la glucosa empieza a circular por la sangre y puede acabar apareciendo la diabetes. Por eso, cuando los niveles de azúcar en sangre son elevados, deben empezar a tomarse precauciones.
Acudir a las consultas médicas es imprescindible para saber los pasos que hay que dar según la condición de cada uno, y para conocer cómo se está generando la insulina y cómo está funcionando.
Por otro lado, evitar el exceso de peso es un factor clave para reducir el riesgo de diabetes, ya que el sobrepeso y esta patología están estrechamente relacionados. Esto conlleva, por supuesto, llevar un estilo de vida saludable, con una alimentación equilibrada y variada, que resulte apetecible e incite a consumir los mejores nutrientes, como aquellos platos ricos en fibra y ácidos grasos, y evitar las grasas trans y saturadas.
Además, practicar ejercicio para dejar a un lado la vida sedentaria es otro punto clave para evitar el aumento de peso, y para mejorar el funcionamiento de la insulina y, en general, de todos los órganos vitales, siempre realizando sesiones adaptadas al estado físico y capacidad que se tenga en ese momento.
Estas recomendaciones no solo contribuirán a reducir el riesgo de tener sobrepeso y diabetes, sino también a mejorar la calidad de vida de todas aquellas personas que las lleven a cabo.