La alimentación saludable es una de las claves para la prevención de la diabetes y, si ya se ha desarrollado la patología, para evitar complicaciones de salud.
Pero además, dietas como la mediterránea tendrían un impacto que irían más allá de la prevención de la diabetes o la obesidad, ya que podrías reducir en un 64% el riesgo de infección por COVID-19, tal y como ha apuntado una investigación liderada por el doctor Miguel Ángel Martínez-González, catedrático visitante de la Universidad de Harvard y director del Departamento de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad de Navarra.
El estudio, realizado a 9.000 personas, ha concluido que “cuanto mayor era el consumo de la dieta mediterránea, menor era el riesgo de infección por coronavirus. Un riesgo que baja hasta el 50% en aquellas personas que siguen este patrón nutricional de forma moderada”.
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