Es importante que los pacientes con diabetes sigamos las recomendaciones del profesional sanitario. Algunos factores en los que se basa la adherencia son las dosis, los intervalos de tiempo, la cantidad de tomas y medicamentos, la relación médico-paciente (empatía, escucha y seguimiento), la educación diabetológica, las complicaciones concomitantes y los factores psicológicos, entre otros.
Junto con esto, se incluye una alimentación saludable y ejercicio físico. Los pacientes suelen abandonar las dietas restrictivas, que además no pueden mantenerse en el tiempo. Por ello, es importante implantar hábitos de vida saludable, además de que los pacientes cuenten con formación para seleccionar, cocinar y consumir correctamente los alimentos. Por su parte, el ejercicio debe ajustarse a las circunstancias de cada paciente, siendo beneficioso para la salud cardiovascular, el control del peso y la mejora del estado de ánimo.
Y tampoco debemos olvidar a las personas con “diabetes tipo 3”. Con este término nos referimos al entorno de las personas con diabetes que, en muchas ocasiones, especialmente si cuidan de pacientes mayores, necesitan conocer pautas para que la adherencia al tratamiento farmacológico no falle (pastillero, calendario con anotaciones, alimentación adecuada, etc.).
En resumen, la adherencia es fundamental para el éxito del tratamiento, mejorando el control glucémico y los resultados clínicos. Las personas con buena adherencia tienen una mejor calidad de vida y menos riesgo de desarrollar complicaciones graves de la diabetes.
Mariana Martínez Aguayo
Influencer con diabetes tipo 2