¿Una alternativa realista para hoy?

¿Podemos sustituir la mayoría de las visitas presenciales de las personas con diabetes por una atención telemática? Con este interrogante finalicé mi participación en la jornada Las TICs y el ecosistema de salud valenciano. Soluciones necesarias para un Nuevo Escenario, un encuentro en el que se debatió sobre la realidad de la telemedicina en los tiempos derivados de la pandemia por la COVID-19.

Sin lugar a dudas, el uso de la telemedicina permitirá y facilitará una importante reorganización de los sistemas sanitarios, mediante el uso de comunicaciones telemáticas frecuentes con el paciente. Ahora bien, no por eso debemos parar de reflexionar a cerca de un modelo asistencial sobre el que todavía hay muchos interrogantes a los que dar respuesta antes de hablar de la telemedicina como una alternativa realista para determinados pacientes, como son las personas con diabetes.

Durante la pandemia, se ha puesto de relieve que ciertas visitas presenciales son realmente necesarias; que hay aspectos que hay que mejorar como el acceso, la eficacia, la eficiencia y la rentabilidad de las TICs; y que no siempre la telemedicina puede ser para todos, pues los pacientes tienen un grado variable de acceso a nuevas tecnologías.

Además de todo esto, nos encontramos también con la falta de formación tanto de los pacientes en su empleo, como de su integración por parte de los profesionales sanitarios en su rutina asistencial. A todo esto se suma, asimismo y aunque no se hable tanto, que se carece de un marco jurídico específico y claro, el cual es más importante de lo que parece pues de lo que se trata es de datos personales de salud muy sensibles.

 No me gustaría parecer negativo, pero honestamente hay que ser realista, lo cual no quita para que, una vez salvadas estas barreras, esté de acuerdo en que la asistencia de los pacientes pueda verse enormemente beneficiada pues, entre otras cosas, las TICs contribuirían a disminuir los tiempos de atención; la brecha geográfica; así como los costes de traslado.

Así las cosas, y pasando a responder a la cuestión inicialmente planteada (¿Podemos sustituir la mayoría de las visitas presenciales de las personas con diabetes por una atención telemática?), soy de la opinión de que las TCSs, a día de hoy, no pueden sustituir totalmente el espacio de la consulta presencial; ahora bien, lo que sí pueden hacer es mejorar la calidad de vida de los pacientes en otros muchos aspectos. Y esto, hay que valorarlo, potenciarlo y trabajar desde las asociaciones de pacientes para conseguirlo, pues estas últimas juegan en todo esto un gran papel.

Firmado por: Fernando de la Torre, vicepresidente 2º de la Federación Española de Diabetes (FEDE) y presidente de la Federación de Asociaciones de Diabetes de la Comunidad Valenciana (FEDICOVA)