Un gran logro que debe dar ejemplo

Las personas con diabetes tipo 2 son un colectivo muy diverso con necesidades específicas en cuanto al tratamiento de su patología. Algunas de ellas, concretamente las que están en tratamiento con insulina, se encuentran con muchas limitaciones, en comparación con las personas con diabetes tipo 1, a la hora de acceder a determinados avances en diabetes y nuevas tecnologías, como pueden ser los sistemas de monitorización de la glucosa en líquido intersticial. Por esta razón, y con el objetivo de conseguir que los pacientes con diabetes tipo 2 insulinizados puedan disponer de los mismos tratamientos para el buen control y gestión de su diabetes, desde la Federación Española de Diabetes (FEDE) elaboramos el decálogo “10 medidas para mejorar la calidad de vida de las personas con diabetes tipo 2 insulinizadas”, con la colaboración de la Sociedad Española de Diabetes (SED), la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), la Sociedad de Medicina Interna (SEMI), la Red de Grupos de Estudio de la Diabetes en Atención Primaria de la Salud (redGDPS) y el Consejo General de Colegios Oficiales de Enfermería (CGCOE), y a partir del que se ideó una hoja de ruta que supone una apuesta por el tratamiento individualizado del paciente y su participación dentro del Sistema Nacional de Salud (SNS).

Casi un año después, han sido muchos los pasos dados en este sentido. Así por ejemplo, y adelantándose a la decisión del Ministerio de Sanidad de incorporar esta tecnología a la Cartera Común del Sistema Nacional de Salud, las CC AA de País Vasco y Región de Murcia han aprobado ya la extensión de la financiación de esta tecnología a este colectivo concreto.

Este es un gran logro que esperamos sea un ejemplo a seguir por el resto de las CC AA. Desde FEDE, en cualquier caso, seguiremos trabajando para que este derecho sea una realidad, más pronto que tarde, a nivel nacional, motivo por lo que continuamos reclamando que, independiente de la CC AA en la que se resida, las personas con diabetes tipo 2 insuliniadas puedan acceder a los sistemas de monitorización de la glucosa en líquido intersticial. En definitiva, que puedan acceder a calidad de vida.